²ÝݮӰÊÓ

Saltar hacia el contenido principal
showDesktop,showTablet,showMobile

Vida después del tratamiento de cáncer de vejiga

Para algunas personas con cáncer de vejiga, el tratamiento puede eliminar o destruir el cáncer. Completar el tratamiento puede causarle tanto tensión como entusiasmo. Tal vez sienta alivio de haber completado el tratamiento, aunque le resulte difícil no preocuparse de la reaparición del cáncer. Esta preocupación es muy común si usted ha tenido cáncer.

Para otras personas, puede que el cáncer de vejiga nunca desaparezca por completo o puede volver en otra parte del cuerpo. Es posible que algunas personas reciban tratamiento regularmente con quimioterapia, inmunoterapia, u otros tratamientos para tratar de mantener el cáncer bajo control. Aprender a vivir con un cáncer que no desaparece puede ser difícil y muy estresante.

La vida después del cáncer de vejiga significa regresar a actividades que usted solía realizar, así como contar con algunas nuevas opciones.

Cuidados posteriores

Después que finalice el tratamiento, sus médicos querrán estar muy atentos a su estado de salud. Las personas que han tenido cáncer de vejiga tienen un alto riesgo de padecer un segundo cáncer de vejiga. Por lo tanto, resulta muy importante acudir a todas sus citas de seguimiento. Durante estas visitas, los médicos le formularán preguntas sobre cualquier problema que tenga y le harán exámenes, análisis de laboratorios y estudios por imágenes para determinar si hay signos de cáncer y/o para tratar efectos secundarios.

Algunos efectos secundarios pueden durar mucho tiempo. Es posible que incluso algunos efectos secundarios no se presenten sino hasta años después de haber terminado el tratamiento. Durante estas visitas, usted puede aprovechar la oportunidad para hacer preguntas. Además, asegúrese de informar a su médico acerca de cualquier cambio o problemas que usted note o expresar cualquier inquietud que tenga.

Consultas médicas y pruebas

Su programa de exámenes y pruebas dependerá de la etapa y el grado del cáncer, los tratamientos que ha recibido, así como de otros factores. Asegúrese de seguir la recomendación de su médico sobre los exámenes de seguimiento.

La mayoría de los expertos recomienda repetir las pruebas cada 3 a 6 meses para las personas que no presentan signos de cáncer después del tratamiento. Estas pruebas se hacen para saber si el cáncer está creciendo nuevamente o si hay un nuevo cáncer en la vejiga o en el sistema urinario. El plan de seguimiento puede incluir exámenes de orina, exámenes físicos, estudios por imágenes (como radiografías, MRI o CT) y análisis de sangre. Estas visitas al médico y las pruebas se harán con menos frecuencia a medida que pasa el tiempo y no se descubran nuevos cánceres.

  • Si no se ha extirpado la vejiga, también se harán exámenes de cistoscopia con regularidad cada 3 meses durante al menos los primeros 2 años.
  • Si usted tiene una derivación urinaria, se verificará si hay signos de infección y cambios en la salud de los riñones. Para esto, se pueden hacer exámenes de orina, análisis de sangre y radiografías. Su vitamina B12 se comprobará al menos una vez al año porque las derivaciones urinarias que se hacen con su intestino pueden afectar la absorción de B12. Su médico también hablará con usted para saber cuán bien puede controlar la orina. También se harán exámenes para buscar signos de cáncer en otras partes de las vías urinarias.

Algunos médicos también recomiendan otras pruebas de laboratorio, como pruebas de marcadores tumorales en la orina que se explican en ¿Se puede descubrir el cáncer de vejiga en sus comienzos? Muchas de estas pruebas se pueden usar para ayudar a saber si el cáncer ha regresado, pero hasta el momento ninguna puede sustituir la cistoscopia.

Pregunte a su médico acerca de un plan de atención para pacientes después del tratamiento

Consulte con su doctor sobre el desarrollo de un plan de atención para después del tratamiento que sea adecuado para usted. Este plan puede incluir:

  • Sugerir un calendario para pruebas y estudios de seguimiento
  • Un calendario para otras pruebas que necesite en el futuro, tales como pruebas de detección temprana para otros tipos de cáncer, o pruebas para identificar efectos a la salud a largo plazo debido a su cáncer o su tratamiento
  • Una lista de posibles efectos secundarios tardíos o a largo plazo de su tratamiento, incluyendo a qué prestar atención y cuándo debe comunicarse con su médico
  • Sugerencias para la alimentación y la actividad física
  • Recordatorios de sus citas con su médico de atención primaria, quien vigilará su salud general

Mantenga un seguro de salud y guarde copias de sus informes médicos

Aun después del tratamiento, es muy importante mantener un seguro médico. Las pruebas y las consultas médicas son costosas y, aunque nadie quiere pensar en el regreso de su cáncer, esto podría ocurrir.

En algún momento después del tratamiento del cáncer, es posible que usted tenga que consultar con un médico nuevo, quien desconozca sus antecedentes médicos. Es importante que guarde copias de sus informes médicos para que proporcione a su nuevo médico los detalles de su diagnóstico y tratamiento. Para más información, lea Guarde copias de los informes médicos importantes.

¿Puedo reducir mi riesgo de que el cáncer de vejiga progrese o regrese?

Si usted tiene (o ha tenido) cáncer vejiga, probablemente quiere saber si hay medidas que puede tomar que podrían reducir el riesgo de que el cáncer crezca o regrese, como hacer ejercicio, comer cierto tipo de alimentos, o tomar suplementos nutricionales. Lamentablemente, aún no está claro si existen medidas que usted pueda tomar que sean útiles.

Posiblemente ayude el adoptar comportamientos saludables, tales como no fumar, una buena alimentación, ejercitarse de forma habitual y mantener un peso saludable, aunque nadie lo sabe con certeza. Sin embargo, sí sabemos que estos cambios pueden tener efectos positivos en su salud que pueden ser mayores que su riesgo de padecer cáncer de vejiga u otros tipos de cáncer.

Suplementos dietéticos

Hasta el momento, ningún suplemento alimenticio (incluyendo vitaminas, minerales y productos herbarios) ha demostrado claramente que ayude a reducir el riesgo de que el cáncer de vejiga progrese o regrese. Esto no significa que ningún suplemento será útil, aunque es importante saber que ninguno ha demostrado que lo sea.

En los Estados Unidos, los suplementos dietéticos no están regulados como los medicamentos, pues no tienen que demostrar que son eficaces (o incluso seguros) antes de ser vendidos, aunque hay límites en lo que se les está permitido afirmar que pueden hacer. Si está considerando tomar cualquier tipo de suplemento nutricional, consulte con los miembros de su equipo de atención médica. Ellos pueden ayudarle a decidir cuáles puede utilizar con seguridad y evitar aquellos que puedan ser perjudiciales.

Si el cáncer regresa

Si el cáncer regresa en algún momento, las opciones de tratamiento dependerán de la localización del cáncer, de los tratamientos que haya recibido anteriormente y de su estado de salud. Para más información sobre cómo se trata el cáncer recurrente, consulte Tratamiento del cáncer de vejiga según la etapa.

Para obtener más información general sobre recurrencia, usted también puede consultar Recurrencia del cáncer.

¿Podría padecer otro cáncer después del tratamiento del cáncer de vejiga?

Las personas que han tenido cáncer de vejiga aún pueden padecer otros tipos de cáncer. De hecho, los sobrevivientes de cáncer de vejiga tienen un mayor riesgo de padecer otros tipos de cáncer. Para más información consulte Cánceres posteriores al cáncer de vejiga.

La vida tras el tratamiento del cáncer de vejiga

Para pacientes con una urostomía

Si usted se sometió a una cistectomía radical y ahora tiene una urostomía, es posible que al principio se sienta preocupado por las actividades de todos los días. Es posible que tenga que alterar algunas de sus rutinas diarias (y nocturnas) debido a cambios al orinar. Otros asuntos, tal como las relaciones sexuales, también podrían ser causa de preocupación (lea información más adelante).

Resulta normal tener preocupaciones e inquietudes al adaptarse a un cambio tan significativo. No obstante, es importante saber que existen profesionales de la atención a la salud que están especialmente capacitados para ayudar a las personas con sus urostomías. Ellos pueden enseñarle cómo cuidar de su urostomía y ayudarle a lidiar con los cambios que ocasiona. También puede comunicarse con la Sociedad Americana Contra El Cáncer para averiguar sobre los programas que ofrecen información y apoyo en su área. Para más información, consulte Guía de urostomía.

Apoyo emocional

Es normal que sienta cierto grado de depresión, ansiedad o preocupación cuando el cáncer es parte de su vida. Algunas personas se afectan más que otras. No obstante, todas las personas pueden beneficiarse de la ayuda y el apoyo de otras personas, ya sea amigos y familiares, grupos religiosos, grupos de apoyo, consejeros profesionales, entre otros.

Sexualidad y sentirse bien acerca de su cuerpo

El tratamiento del cáncer de vejiga a menudo puede afectar su vida sexual. (Consulte Cirugía para el cáncer de vejiga para más información). Aprender a sentirme cómodo con su cuerpo durante y después del tratamiento del cáncer es una experiencia personal que es diferente para cada persona. La información y el apoyo que usted reciba pueden ayudarle a afrontar estos cambios con el pasar del tiempo. Más información en Efectos secundarios relacionados con la fertilidad y la sexualidad en personas con cáncer.

Equipo de redactores y equipo de editores médicos de la American Cancer Society

Nuestro equipo está compuesto de médicos y enfermeras con postgrados y amplios conocimientos sobre el cáncer, al igual que de periodistas, editores y traductores con amplia experiencia en contenidos médicos.

Actualización más reciente: enero 30, 2019

Nuestra labor es posible gracias a generosos donantes como usted.

Done ahora para que podamos continuar brindando acceso a información crítica sobre el cáncer, recursos y apoyo y así mejorar las vidas de las personas con cáncer y sus familias.